Aquellos que escucharon las declaraciones del diputado por Cambiemos y presidente del PRO santafesino, Federico Angelini, donde responsabiliza al gobernador Lifschitz por el incumplimiento del pago de la deuda que Nación mantiene con Santa Fe, se darán cuenta que, claramente, no defiende los intereses de la provincia.
El legislador PRO dijo que “en el momento en el que se hizo la oferta, la provincia se demoró, luego empezaron todas las turbulencias económicas que ya sabemos, y eso obviamente desvalorizó mucho la oferta que se había hecho en el momento”…
¿Angelini conoce la propuesta que intentó elevar el gobierno nacional? ¿De saldar el 60 % de la deuda con bonos a pagar en décadas, sin actualización alguna, y que, además, pretendía pagar el resto con obras públicas que ellos mismos iban a determinar?
¿Dónde se ha visto que un acreedor decida cuándo, cómo y con qué va a saldar una deuda que además está respaldada por una sentencia de la Corte Suprema? ¿Qué tipo de defensa a los intereses de los santafesinos está haciendo el diputado, cuando sugiere que el gobernador debía aceptar esa vergonzosa oferta, tras haber esperado dos años y medio con responsable paciencia, una propuesta seria y adecuada a las necesidades de la provincia?
Nosotros venimos reclamando reiteradamente ante la Cámara de Diputado con diferentes iniciativas para intentar recuperar los fondos de la coparticipación federal que fueron descontados en forma indebida por la Nación.
La provincia firmó el último pacto fiscal bajo la condición de recibir en seis meses una propuesta de cancelación de la deuda, que actualizada, ya ronda los 100.000 mil millones de pesos. Y tras casi un año y medio, y bajo una nueva extorsión para firmar un nuevo pacto fiscal, la provincia ha decidido volver a la Corte, para que determine la forma de pago. Sencillamente porque nunca nos pagaron un centavo de lo adeudado.
Por otra parte, no hay provincia más perjudicada que la nuestra en materia de obras públicas y de distribución de recursos coparticipables. No sólo no han cumplido con las obras que anunciaron, casi todas paralizadas o sin iniciar, sino que además dejan afuera a la provincia de todos los planes de infraestructura que vienen anunciando para futuro, sin que detrás de esos anuncios haya presupuesto alguno para comenzar a hacerla.
Hoy tenemos los mayores indicadores de pobreza, desocupación e inflación que recuerde el país en los últimos 15 años. El gobierno de Santa Fe volverá a la Corte y lo hará con objetivos muy claros y que tienen que ver con defender la integridad de los recursos genuinos que Santa Fe dejó de percibir y proteger la libertad de la provincia para utilizar sus recursos.