La Ciudad de Rosario, el gran Rosario, la Provincia de Santa Fe, la Bolsa y el sector privado han sabido construir el mayor complejo oleaginoso del mundo.

Por las terminales portuarias del Gran Rosario se despacha el 78 % de las producciones de granos, aceites y subproductos de la Argentina. Nuestra provincia produce un poco más de 15.000.000 millones de toneladas de granos, de las cuales casi 11 millones de tn corresponde a la producción sojera. Solamente en aceites y subproductos se despachan más del 90 % por estas terminales.

Santa Fe posee la concentración más grande de plantas de Biodiesel, aunque ahora este en dificultades por las nuevas retenciones al sector. Podríamos dar más datos, pero lo que queremos marcar es el fuerte dinamismo del complejo sojero en la región, la capacidad para la innovación tecnológica de nuestros productores y empresas y las posibilidades de agregado de valor que esto genera.

Es cierto que también nos traen grandes desafíos a resolver: la energía, la infraestructura, la industrialización de la producción primaria, la generación de mayor empleo, el cuidado del medio ambiente, resolver los desequilibrios territoriales y productivos, etc.

Trabajamos día a día por una sociedad más inclusiva, desde todo punto de vista: en lo económico, educativo, social y también en lo político.

El consenso, el diálogo, los acuerdos estratégicos son fundamentales en la sociedad democrática para que ésta en su conjunto pueda marcar un horizonte común.

Santa Fe y el país necesitan inversiones. Las empresas necesitan un clima para proyectar su futuro, para planificar su crecimiento. La gente necesita un Estado presente y eficiente.

Sin embargo, el país adolece hoy de un estado federal que de cuenta de la complejidad productiva, social y cultural de la Argentina. No es ya el reclamo de un sector, de un gobierno o de una región. Es una condición para que la renta diferencial que el campo produce se complemente con otros desarrollos, complementarios, paralelos y transversales, que nos permitan diversificar nuestra economía, abrir mercados, anticiparnos a los ciclos internacionales y sobre todo, definir un modelo de país, en grande, y no un modelo de gobierno en chico. Es una demanda cívica, es más república, es más democracia.

Está claro, que también necesitamos del compromiso del sector privado en la búsqueda de un desarrollo más integral. Y una de las tantas formas de hacerlo es fortalecer la institucionalidad económica y la transparencia de los mercados.

Si tenemos un recinto y un mercado de granos como el de la bolsa, que está constituido por un conjunto de actores que participan del mismo y que mediante la transparencia en las operaciones logramos que muchos pequeños actores puedan defender sus precios, debemos fortalecer este sistema.

Santa Fe tiene mucho para aportar desde su perfil agroalimentario y agroindustrial. Nuestra provincia tiene una diversidad productiva muy rica: una cuenca arrocera en expansión, la caña de azúcar, el algodón, la apicultura, la producción de leche y quesos, ganadería mayor y menor, etc. Tiene todas las condiciones para generar un proceso agroindustrial incluyente de las personas y de los territorios, que nos va a permitir acercarnos a un desarrollo integral. Y lo debemos hacer junto a la Nación y con Ustedes el sector privado.

Para que se cumplan estos objetivos quiero expresar la necesidad imperiosa de que de distribuyan los recursos federales con mas equidad, que la Nacion no nos demore más la autorización para realizar el acueducto de Reconquista que hemos conseguido financiar con fondos del Estado de Kuwait, que va a beneficiar a cientos de miles de personas, que nos autorice el financiamiento internacional para las obras de riego de 10.000 has de la cuenca azucarera, que va a cambiar el paradigma productivo de una parte del Norte de nuestra Provincia, que nos cumplan con los aportes que le corresponde a la provincia según destintas leyes nacionales, o que nos ayuden a cambiar la matriz de la infraestructura vial para que acompañemos el crecimiento productivo en forma segura y armonica, etc.

Apelamos al diálogo y al convencimiento de que la democracia necesita un minimo de consenso institucional que nos permita en forma sostenida desarrollarnos.

Muchas gracias.