Reunir capital crítico para construir un partido con vocación de poder
Hace unos días tuve la oportunidad de sumarme en las comisiones del campamento de la juventud radical donde los jóvenes debatían acerca de la actualidad política. Quede muy entusiasmado y esperanzado en el rol que pueden asumir las nuevas generaciones en las futuras decisiones en los ámbitos locales, provinciales e incluso nacionales porque se discutieron temas que hacen a la realidad y a los hechos políticos que marcan la agenda de los argentinos.
El jueves pasado tuvimos una de las manifestaciones más importantes que tuviera el país en los últimos años. Miles y miles de argentinos coparon las calles en una decisión casi personal, sin una convocatoria unívoca, expresando un cocktail de demandas, quejas, añoranzas, y repudio también. Difícil sintetizar en una sola consigna, aunque por supuesto, el rechazo a la deriva autoritaria del actual gobierno era común a todos.
Para quienes militamos a diario, particularmente en la Unión Cívica Radical, ese hecho y su mensaje no pasa desapercibido. Tenemos que ser muy cuidadosos en aventurar interpretaciones forzadas, fáciles y hacer foco no tanto en lo que pasó, sino en lo que tiene que pasar. Esto es una interpelación directa a la responsabilidad que nos toca a cada uno, desde su lugar, en la construcción de la Argentina de los próximos años.
Qué hacemos frente a esto? Recuperar la política. Qué significa?
Como tantas otras consignas y conceptos que el peronismo kirchnerista vació de contenido, los derechos humanos, las políticas universales, la transparencia y el sentido de lo público; la recuperación de la política también ha sido bastardeada por este gobierno.
Recuperar la política es confiar en nuestras capacidades, en nuestras ideas y sobre todo, entrar al escenario nacional con la convicción de que queremos gobernar nuevamente este país. Con la misma convicción que paramos los más de 20 años de peron-ismo, reutem-ismo, obeid-ismo y varios ismos más, tenemos que construir la alternativa al peronismo y kirchner-ismo, no con una fuerza de un apellido + un ismo, con la fuerza de militantes y de la gente, de los valores de la democracia y la república.
Los jóvenes, y quienes, aunque no en edad, pero que portamos mas ganas que canas, tenemos que recuperar la política, y para ello propongo 3 ideas o actitudes que considero básicas para esta construcción colectiva
1- amplitud de miras: no nos quedemos en la anécdota ni en disputas personales. Pensar políticamente es salir del ego, y darle importancia a lo colectivo
2- vocación de poder: quién dijo que el kirchnerismo es invencible? Las escenificaciones de poder, sus gestos de dureza, son la mejor expresión de su debilidad, moral y política. Queremos ganarles las elecciones, pero queremos ganar para producir el cambio. Como lo estamos haciendo en Santa Fe.
3- Humildad: ya hemos cometido el error de pensar que ganar elecciones es el final de la carrera, Ganar una elección es el comienzo, siempre, de la carrera más larga y difícil.
creo que esa marcha, aparte de ser contra las politicas del gobierno, se ve el la gente tiene un gran problema con el espectro opositor. Las marchas autoconvocadas, hechas por las misma gente sin un aparto politico detrás, significa que todavia la gente no ha encontrado quien lleve las banderas de lo que esas personas estan pidiendo. La crisis opositora hace que uno se sienta sin aparatos que expresen lo que uno necesita, y eso significa una crisis tremenda tambien de la parte opositora. El mensaje tiene que llegar a todos, kishnerismo y oposición. si eso se entiende estamos por buen camino, si algunos políticos opositores quieren sacar provecho de esto y no hacer una critica desde adentro de lo que esta pasando realmente, estamos condenados a no crecer jamas
completamente de acuerdo.lo que pasa es que casualmente el radicalismo es el que desconcierta.por emj. brindando a dos manos el acuerdo e n el Senado a Gil Carbò
Adhiero al párrafo donde se expresa el vaciamiento de contenidos en relación a derechos humanos, las políticas universales, la transparencia y el sentido de lo público, a l o que agrego el agravante del daño generado con tanta mentira puestas al servicio de la fractura social por la pura ambición de sostenerse unos a otros en las posiciones de privilegio que han logrado conseguir sobrecargando de íconos vacíos los discursos y manchando todas las banderas. «Mientras tanto, los pobres siguen siendo los mismos pobres» decía el Pabre Atilio Rosso. Mientras tanto, para este país donde ultimamente parece que hay que salir a la calle con carnet de afiliación ( Sos K o nos K, esa es la cuestión…) sólo tengo para ofrecer un poema:http://www.youtube.com/watch?v=itJOwm9njvw
Es verdad que esa marcha y las anteriores sirvieron para que saliéramos a la calle a expresar multitud de demandas al gobierno nacional, pero también es una muestra de la falta de una figura o un grupo opositor que nos de esperanzas que el cambio puede ser posible. Creo que la Unión Cívica Radical tiene mucho camino por andar aún para generar confianza y credibilidad. Ya estamos hartos de falsas promesas y de hablar sin hechos que plasmen las palabras. Somos muchos los que militamos diariamente por un cambio, cambio que seguramente no veremos pero dejaremos a nuestros hijos y nietos. Necesitamos volver a tener esperanzas, encontrar un líder que nos convenza que le preocupa las mismas cosas que a todos los ciudadanos, que esté al lado de los ciudadanos mirando por y para su bienestar y el del país, y no sólo acrecentando poder partidario y personal. Y todo esto se logra con el ejemplo, no con discursos que se quedan en el aire. Me encantaría que la Unión Cívica Radical tuviera ese líder que tanto necesitamos, con fuerza y actitud, pero hoy en día nadie ocupa ese lugar a mi entender.