Argentina necesita una coalición progresista
En el estallido del 2001 no solo voló la convertibilidad. Las instituciones y el sistema de partidos sufrió una deslegitimación de la cual aún no se han recuperado. Del “que se vayan todos”, que tocó en mayor o menor medida a todos los dirigentes de la época, a la actual situación, no podemos decir que hubo una gran renovación de caras y de prácticas. Tenemos que decirlo claro, la crisis de la democracia todavía está lejos de resolverse.
En el país hoy no hay un partido de gobierno, tampoco un partido de oposición, y el mapa político está plagado de caciques regionales en un mosaico de intereses que se articulan de forma ocasional según conveniencias.
Con este diagnóstico en la mano, en la provincia de Santa Fe, los radicales decidimos priorizar las afinidades con otros partidos para ofrecer a la sociedad ya no una sigla o unos colores, o la cara de un dirigente, sino un programa de gobierno.
La construcción de una coalición con vocación de poder es una tarea difícil. No se trata solamente de sentar a la misma mesa personas con historias personales de simpatías, desavenencias y cuando no, traiciones. Se trata de dejar de lado personalismos y abrir la carpeta de los proyectos y las ideas. En Santa Fe, con dificultades, con carencias, pero con mucha perseverancia y entusiasmo lo estamos llevando adelante los militantes junto a la gente, que ha ratificado este rumbo en las contiendas electorales.
Entiendo las preocupaciones de Margarita Stolbizer sobre los fundamentos de una posible coalición y estoy seguro que con voluntad y trabajo, sin personalismos y con claridad en la propuesta llegaremos a buen puerto. No es un imperativo para salvar partidos o dirigentes, es una necesidad de la democracia Argentina que exista una coalición progresista con vocación de gobierno.
En Santa Fe va a ganar el Frente Progresista Cívico y Social donde la UCR está plenamente integrada y es determinante para su existencia.
Humildemente pensamos, que en el resto de los distritos se debería tomar este modelo para que juntos podamos ofrecer la mejor alternativa para el conjunto de los argentinos. Hay expectativa en la sociedad para que esto ocurra y una futura coalición comienza a definirse en las próximas elecciones en todos los distritos para llegar fortalecidos al 2015.
Comentario
TE SIGO SIGUIENDO
Jorge: El tema está muy bien planteado e incluso su encuadre histórico es correcto. Sugeris en tu nota que hay una exigencia teórica, la construcción de una coalición y las condiciones del acuerdo, y una exigencia práctica; realizarla en términos políticos más allá de las dificultades que presenta una realidad que tiende a la fragmentación. Creo que las posibilidades en el orden nacional son difíciles pero no imposibles.Como diría Gramsci, «pesimismo de la inteligencia , optimismo de la voluntad» Rogelio
La frase que citás es una excelente síntesis de los condimentos que hacen falta para esta tarea, casi parecida a la que tuvo el filósofo-político en aquellos tiempos de deformación autoritaria de la democracias. Un gran abrazo!
excelente comentario! nunca más actual y necesario que en ésta época y para mi Provincia, Buenos Aires, que necesita entendimientos en base a un proyecto progresista, socialdemócrta de características similares al que se aplica en Santa Fé
Gracias Fabio, un abrazo radical!