25 de Mayo de 2013
En el marco del 25 de mayo, estuve acompañando al Gobernador en toda la agenda oficial, escuché al Monseñor José María Arancedo, quién instó a trabajar por la unidad del pueblo, como fundamento de “una amistad que nos permite enriquecernos con la diversidad de sus miembros. Ni hegemonía de la unidad, ni anarquía de la diversidad -advirtió-. En esto juega un papel importante en la vida de la República la sabiduría y la magnanimidad de sus dirigentes, con su responsabilidad política y ejemplaridad social.